martes, 10 de agosto de 2010

Wild Horses - The Sundays

Sólo un rato me detengo. Porque sigo en este mundo.
Con esta canción, sólo un momento expongo mis imágenes:
La calle Baquedano en Iquique, casi de noche y una imagen borrosa... alguien saltando... ¡No! Alguien corriendo y girándose hacia la cámara, se acerca el invierno y hay viento, por lo que su cabello triste intenta arrancar... el viento es delicado.
Una calle de Coyhaique, escojo Ogana ¡no!, escojo Pratt... ¡no! Escojo Los Coihues, la calle que vi todos los días luego del colegio. Esas luces y los autos alejándose camino arriba, las manos tendidas y el camino de nunca acabar; mis piernas se doblaban y el aire se escapaba de mi boca. En invierno luchaba contra la física para llegar a casa.
Un momento de Curicó. Ese momento en que me perdía en la ciudad tan pequeña, en el que mi cabeza era minúscula entre medio de las calles y mi corazón se sentía gigante, enorme... inmenso. La plaza.
¡Conce y el miedo a la pasarela! ¡Valparaíso y sus escaleras!


Y la canción se me achica, se me acorta, se me deshace.